Luego de haber lanzado mi blog en el 2015, es natural que llegue un momento de mirar hacia adentro y darte cuenta lo mucho que has evolucionado.
¡Qué comience lo nuevo! Desde hace un tiempo quería pasar por el proceso de revisar esos elementos visuales que conforman a mi marca. Entiéndase, el logo, la paleta de colores, la tipografía y escoger vectores gráficos esenciales para los diseños y artes. En fin, actualizar la identidad visual de lo que ustedes conocen como, Nathasha Bonet.
De lo viejo a lo nuevo
El logo inicial fue creado en agosto del 2015, como parte de lanzar mi blog de moda www.nathashabonet.com. Con artículos constantemente publicándose sobre tendencias y consejos de moda, quería que el blog se sintiera como mi propia revista, con los temas que a mí me apasionaban escribir.
Con una tipografía estirada y elegante, el logo estaba inspirado en los titulares de las revistas de moda y periódicos. Lo utilicé por casi 6 años y aunque siempre me gustó mucho, con la evolución y crecimiento de mi voz en las redes sociales, sentía que necesitaba una versión más impactante y “loose”. Que se pudiera traducir el mismo impacto que mi voz tiene entre mi comunidad, en el ícono visual. Para eso había llegado el momento de decirle adiós a esta versión más conservadora, polite y “derecha”. Al menos así yo le percibía.
Un buen logo es capaz de transmitir el mensaje que tu marca representa. Por eso, muchas marcas y compañías lo actualizan cada cierto tiempo para mantenerse al día en cuanto a los tiempos y cómo su propia audiencia le percibe. Cambiarlo no debería ser una costumbre, que confunda a tu audiencia, sino una decisión importante que no se toma a la ligera y genere una respuesta positiva. Un buena regla general es considerar hacerlo cada cinco-diez años, siempre y cuando creas necesario. Sino, let it be!
Todo depende de lo que busques para ti y tu marca. En mi caso, como ya estaba en las de diseñar un website nuevo, me pareció la ocasión ideal para de una vez darle un upgrade al logo. ¡Y así fue! Quizás solo busques actualizarte a los tiempos, elevarlo y llegar mejor a tu audiencia, no importa la razón después que tengas un propósito.
Inspirándonos para el nuevo logo
Vianna, creadora del estudio de diseño Vee Design, fue quien trabajó el logo y me ayudó en todo el proceso. Desde el comienzo, se adentró a mi marca y propósito para tener una idea de lo que queríamos representar visualmente. También estudiar mi contenido para identificar esos colores que me representan y simbolizan esas emociones que constantemente me gusta provocar.
La inspiración fue basada en mi estilo de vida, desde los amaneceres y atardeceres, hasta mi pasión por la moda, y lucha por el feminismo. Luego de reunirnos, ella me hizo sentir súper cómoda y emocionada por lo que estábamos haciendo. El servicio incluye varias revisiones, en las que puedes compartirle tus observaciones y sugerencias, de acuerdo a tu gusto, para que así el logo sea mejor a cómo te lo imaginas.
La primera propuesta de Vee Design para el logo fue esta:
Me encantó muchas veces el isotipo, que es la representación simbólica de la marca –en este caso, la unión de la N y la B–, sin embargo el logotipo (el nombre completo escrito) siento que es muy sencillo para lo bold que me lo imagino cuando plasmo “Nathasha Bonet”. Todavía me gustaría trabajar la tipografía para buscar una más alineada al impacto visual que quiero impulsar con mi nombre. Por lo que, ¡manos a la obra!
Así que así se vio la segunda propuesta de Vee Design para mi logo:
Los colores en esta propuesta ya se estaban acercando a los que quería usar para identificar mi marca personal. Sin embargo, todavía estaba teniendo dudas sobre el logo. Sentía que todavía no había llegado a dónde quería que llegara en términos del nombre y su representación visual. Me gustan las cursivas más para sub-titulares o textos específicos que quiero resaltar. No como tal para el logo. Para algunos, parecería que estoy siendo difícil, pero más bien siempre tuve claro hacia dónde me exactamente me quería dirigir con este cambio de imagen. Se trata de uno de los cambios más importantes de tu marca y no debe tomarse a la ligera.
Esta versión fue la base perfecta para montar el resultado final. Igualmente, en esta ocasión me encantó nuevamente esta otra opción del isotipo. Por lo que una o la otra, en un futuro me gustaría trabajarle uno acomodado a la versión del logotipo que escogimos finalmente.
Repensando la paleta de colores
Otra cosa que le dije adiós fue a los colores del blanco y negro. Si algo no soy yo son esos clásicos absolutos. Han sido parte de mi vida por mucho tiempo, pero estaba lista para algo más auténticamente yo. Me encantan los colores y jugar con patrones, curvas, diseños. Entre más vivos, vibrantes y brillantes, ¡mejor para mí! Así que sin duda, la paleta de colores de mi marca necesitaba alinearse a la percepción que mi comunidad y yo tenemos de mi ser.
Les admito que esta fue la parte más difícil para mí. Podía decir que quería rojo, anaranjado y rosa, pero existen un sin número de tonalidades como tal de cada color y se pueden combinar de infinitas posibilidades entre sí. Para esto querrás tener una la numeración exacta del color que escogiste para que todo tus comunicaciones se vean consistentes en cuanto a la imagen. De más está decirte que el proceso fue, el proceso. Aunque desde el principio me imaginé la paleta de colores yéndose específicamente entre colores cálidos, nos tardamos el tiempo necesario para estar súper feliz e identificada con la selección de colores.
Si has prestado atención a lo largo de los años a mi contenido, podrás ver cómo de ser una voz más chic, fría y distanciada; he evolucionado a una más intencionada, líder, lo que algunos llamarían también “rebelde” y atrevida. Por lo que alejarme del clásico blanco y negro era necesario. Así que luego de mostrarles un preview a mi audiencia de Instagram Stories para ver qué pensaban, muchas de sus respuestas me confirmaban que iba por la línea de correcta.
Entre mi pelo color ginger, usar mucho labial rojo, retratar amaneceres y atardeceres con mi pareja @airtistry, definitivamente me veían como me estaba viendo. Estábamos alineadas. Cada color tiene el poder de provocar una emoción o un simbolismo que lo ayuda a comunicar un mensaje. Piensa en esas tonalidades que –juntas entre sí– representan mejor quién eres tu y/o tu marca. Aquí te comparto lo que representa cada color de mi maca personal para mí:
- Rojo: poder , fortaleza y pasión
- Anaranjado: creatividad, alegría y energía
- Rosa: espontaneidad, feminidad y bondad
El resultado final
En el proceso de escoger los colores y el nuevo logo, una de las cosas que hablamos era incorporar de alguna manera una curva, ya fuese en el logotipo o en los elementos de la marca. Me recuerda lo flexible, libre y mente abierta que soy, así que Vianna me presentó estas dos opciones. Que si antes era difícil escoger el diseño final, ¡ahora aún más! Estaba súper encantada con ambas opciones de logo.
Luego de mucha deliberación, buscaba un cambio más obvio a la versión antigua. Quería que se nota la diferencia, y aunque las tres líneas curvadas me encantaba, no podía decir lo mismo de cuando el nombre estaba solo. Amé cómo se veía el de la derecha con el nombre completo dividido en dos partes, siguiendo el movimiento de la marca. Siempre estoy en movimiento hacia lo próximo así que qué mejor opción que esta. La tipografía más ancha y en caps fue otro de los factores que me inclinó hacia esta nueva versión. Pues es como, “¡mírame, estoy aquí!”.
¿Qué te pareció todo el proceso? No te pierdas este vídeo en mi IG-TV resumiendo esta aventura de darle una nueva identidad visual a mi marca personal.
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