La oficina es uno de los lugares donde más tiempo pasamos en nuestro diario. Por lo que nadie quiere pasar el resto de sus días en un espacio monótono, y más si trabajas desde la casa, como yo.
Transformar mi espacio de trabajo ha sido una de las tareas más satisfactorias. Ahora cada vez que entro a mi home office, me siento inspirada a crear y darle una nueva intención a las tantas horas que paso en esas cuatro paredes.
Luego de varios meses dedicándole atención y decorar mi oficina, aquí te comparto algunos consejos que me ayudaron y una mirada paso a paso al proceso de transformar el espacio. Desde el 2018 trabajo por mi cuenta creando contenido y manejando estrategias de redes sociales, así que decidí separar un cuarto de nuestro apartamento para usarlo de oficina.
Colores
Una de las primeras decisiones a tomar son los colores que predominarán en tu espacio. Puedes tener dos colores que sean los principales, y un tercero –o secundarios– que rompa con el contraste de los anteriores. Busca esas tonalidades que provoquen una emoción o que te simbolizen un sentimiento para ti. En mi caso, quería que mi home-office tuviera también los mismos colores de mi marca personal, que son rojo, anaranjado y rosa. Al final del día, ahí es donde creo todo lo relacionado a ella. Así una vez tengas claro eso, es más fácil proceder a diseñar el mockup de la habitación.
El mural y sus curvas
Entre tanta pared blanca, sentía que le hacia falta añadirle color al menos a una. Desde hace un tiempo quería colaborar con la artista puertorriqueña Lorena Nazario, quien se dedica a pintar murales, y me pareció la oportunidad perfecta para elevar el espacio. Después de hacer research y conversar sobre lo que quería, nos decidimos por hacer un arcoíris de curvas con la paleta de colores, incorporando esta vez un toque de amarillo para iluminar con ese pop of color.
Antes de comenzar a pintar y haber escogido la pintura, Lorena me envío tres opciones de diseño que giraban alrededor de la idea de curvas para que yo escogiera el más que me gustara. El número uno me encantó, además que se incorporaría muy bien con el mueble anaranjado que buscaba acomodar en la pared. ¡Ahora a pintar!
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Muebles, libros y detallitos
El proceso de transformarción fue súper emocionante porque podía ir viendo cómo todo iba cayendo en su lugar. Poco a poco el diseño de la oficina fue influenciado por los muebles que iba reuniendo. Algunos, como el rack de ropa y el escritorio de Ikea, ya los tenía. Otros los busqué en el momento, como esta espectacular silla anaranjada que conseguí en especial en Abitare, en Hato Rey.
Luego de estar visitando tiendas de decoración todo el día en la zona metropolitana de Puerto Rico, ya casi rendida, me da con parar en una última tienda y cuando abro la puerta ahí estaba esperándome. Tan única y llamativa, en justo el color que la buscaba, y mira que el anaranjado es un color difícil de conseguir en piezas de decoración del hogar. Estaba que no cabía de la emoción, todo estaba conspirando.
Una vez ya la tenía ubicada en la oficina, me tocaba decidir qué la acompañaría: si un mueble de Ikea para ubicar libros y otros detallitos, u otra silla con una mesita entre medio por si tenía invitados o decidía grabar entrevistas en el área. Finalmente escogí el mueble porque quería un lugar donde se vieran visibles mis libros.
Ahora se ha convertido en una de mis esquinas favoritas de la oficina, pues no solo puedo trabajar en la computadora cuando quiero cambiar de lugar, sino que es un spot ideal para desconectarme con una buena lectura. Complementé su alrededor con piezas groovy, funky, coloridas y diferentes.
En la silla puse un cojín en forma de beso y otro cojín en forma de caracol para continuar dándole personalidad al home office. Ambos son de Amazon y puedes darle clic para que te lleve a sus enlaces.
El Buddha me pareció tan peculiar encontrarlo en color fucha, que no podía dejarlo ir. Es de Marrés Decoración, hecho a mano y lo puedes conseguir también en rojo. Es un recordatorio visual para mí de mantenerme en el presente, conectar con mi intuición y dejar ir lo que no puedo controlar.
Por último, el portavasos de resina me tiene obsesionada. Tengo una en la mesa y en el escritorio. Este fue creado con mis colores por Beatriz Sánchez, la creadora de B.Fab. Allí podrás encontrar piezas únicas de moda y decoración al hogar creadas por la artista puertorriqueña. Por su parte, la vase acrílica de burbujas en color anaranjado y la vase rosa en forma de curvas son una de mis piezas favoritas dentro de la habitación, pues hablan por sí solas.
Otro detallito hermoso es esta bandeja de mariposa que utilizo para poner accesorios que me quite durante el día o mis airpods que usualmente utilizo mucho dentro de la oficina. Está disponible en varios colores, y para mí la mariposa es uno de mis elementos favoritos así que no podía faltar. Significan transformación y qué mejor transformación que esta misma. Más adelante me gustaría añadir también una alfombra de mariposa y/u otra con mi logo para rellenar los espacios que falten en el piso.
Añade flores o plantas
Ese toque de verde no podía faltar en la oficina, no solo para salir de los colores cálidos, sino que las plantas –incluso las falsas– pueden ayudarte grandemente a bajarle al estrés, impulsar la creatividad e inspirarte. Queremos estar conectadas a la naturaleza. La que tengo la conseguí en Home Goods en Marshalls, y tiene una base blanca con las patas en madera. La amo muchas veces.
En la parte de atrás tengo ecaulipto en una de las vases, que de hecho, ya toca cambiarlo. Me encanta el olor, es fresco, pero también seco. Lo puedes tener varios meses contigo y le añade un aroma relajante a la habitación. Otra opción que me encanta es tener accesibles cerca de mi escritorio aceites esenciales, como de menta, que ayuda a la concentración, naranja o romero.
Cuadros y Gallery Wall
La pared detrás del escritorio estaba todavía vacía y tenía que decidir qué hacer: si poner varias tablillas blancas que aguantaran libros, cuadros y más detalles peculiares de decoración, o crear un Gallery Wall, que resaltara mis pensamientos o imágenes favoritas. Me terminé inclinando más por la galería de cuadros ya que, para mí, es una declaración más llamativa.
Los cuadros le dan personalidad a las paredes. Puedes usarlos para mantener tus fotos favoritas, frases inspiradoras, artes e ilustraciones que te motiven a dar lo mejor de ti. Mira cómo quedó:
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Aprovecha la oportunidad de recolectar artes e ilustraciones para apoyar a artistas locales que te gusten. Yo tenía que incluir esta que me hizo Valentina Valldejuli con mi característico blazer rojo para empezar.
También en Etsy consigo muchos prints bonitos que puedes comprar. Otros artes los diseñé yo misma para personalizarlos lo más posible, que si te gustan están disponibles aquí en el Natha’s Shop. A continuación te comparto los enlaces a algunos wall arts que incluí en mi Gallery Wall:
- Ying Yang Wall Art
- Sunrise Y2K Funky Wall Art
- Butterfly Wall Art
- Groovy Flower Power
- Boho Rainbow Art
- Tiger Wall Art
- Hot Pink & Red Heels Art
- MidCentury Modern Abstract Circles
- Sunrise Y2K Funky Wall Art
- Matisse Wall Art
- Pink & Orange Abstract Art
Mi pareja me dio la idea de enmarcar con pintura rosa el espacio donde se colocarían los cuadros, y me pareció un detalle genial para resaltar el efecto de la galería. De hecho, fue él quien se encargó –gracias mi amor– del proyecto de medir las distancias y determinar dónde se colocaría cada clavo y cuadro para que quedara montado visualmente armonioso. Es una de las primeras cosas que ves al entrar a la oficina y también es el fondo perfecto para mis llamadas y reuniones virtuales, selfies y fotos bonitas.
El escritorio
Las lámparas son más que necesarias y pueden llegar a ser el centro de atención de tu escritorio. No optes por una lámpara aburrida y tradicional, busca mejor una que genera curiosidad o conversación. Así ya se iba viendo el cuarto…
Algunos de los detalles que resaltan en mi escritorio son: el cenicero rojo en forma de labio, la vase acrílica roja en forma de flor, que conseguí en Etsy, el organizador de lápices, el tapete antideslizante para proteger el escritorio y el sticky notes holder.
Por otra parte, dejé la misma silla del escritorio que ya tenía en color azul, aunque admito que eventualmente me gustaría cambiarla a amarilla. ¡Qué no se vería bella también! Solo hay unos pocos detalles de este color dentro del espacio así que me parece un excelente contraste para bring everything together.
Otro detalle que eventualmente me gustaría añadir es un pink neon sign, encima del rack de ropa. Es un proceso así que poco a poco vamos.
Velas y Espejo de Corazón
Este espacio en blanco en la misma pared de los cuadros me sobró y fue perfecto para añadirle unas piezas adicionales, pues ubica en el pasillo que me lleva al escritorio. El espejo en forma de corazón está súper cute y puedes guindarlo de la pared o pararlo en su patita. Para no dejarlo solito, decidí añadir este estante de pared acrílico en color anaranjado.
Allí, coloqué más velas, entre ellas la vela en espiral, la vela de curvas color crema, y la mano acrílica en color rosa, que te sirve para poner joyería o simplemente decorar y/o recordar que todo está de show, no importa lo que pase. 👌🏼
Otros detallitos
Otro mueble que le dije que sí para la oficina fue esta mesita vintage que mi mamá tenía guardada sin usar. No hay nada mejor que darle una segunda vida a esas piezas que ya cumplieron su primer propósito. Lo próximo fue comprar un tinte en spray color candy pink para pintarla.
Luego de secarse, qué mejor lugar para colocar un teléfono vintage en color rosa que me regaló una de mis mejores amigas.
Estas velas de círculos son visualmente satisfactorias lol y la vela amarilla con una forma curiosa la puedes conseguir aquí, junto a otros colores y formas. Huelen riquísimas, aunque ni siquiera las prenda, que realmente no lo haré porque son demasiado bonitas. El jarrón del cuerpo femenino desnudo me recuerda todo lo que represento en mi naturaleza. También lo puedes poner de espalda para que sea vean las nalguitas bien cute. Con esto, junto al jarrón plástico rosa, creé un conjunto bonito de elementos a resaltar en las tablillas del rack de ropa. Mientras que en las tablillas restantes, aproveché para ubicar cajas de storage, que me hicieran accesible mis documentos importantes, herramientas y materiales.
La entrada
Desde afuera, antes de entrar a la oficina, puedes ver la silla acompañada de un cuadro que me fascina que dice BE THE CHANGE. Este lo encontré en Marshalls, y sin pensarlo me lo llevé pues es un motto constante en todo lo que hago. Sé tú, sé diferente y haz la diferencia.
También podrás leer la palabra BOSS, encima del aire acondicionado, y las velas blancas en forma del cuerpo desnudo de una mujer. Sí, como pueden ver me encantan las velas y me aseguré de tener varias en este rincón de creatividad.
En la entrada de la oficina, a mano izquierdan, te saludará una ilustración creada por Bianca Montoya de Unusual Girls. Mi cabello ginger, los collares y las pantallas, y las hojas coloridas en la parte de atrás gritan mi nombre.
Fue un detalle que una marca de belleza me envío luego de haber colaborado juntas. Me parece súper cute tener un portrait ilustrado de #LaBigBoss.
Transformar mi espacio de trabajo me ha inspirado a crear y darle una nueva intención a las tantas horas que paso en estas cuatro paredes. Una de las cosas que más me gusta es disfrutar de la luz que entra en las tardes iluminando los detalles que más me gustan.
Finalmente puedo decir que mi oficina desde casa refleja hermosamente el sentimiento de quién soy, mi propósito y cómo quiero impactar positivamente en el mundo.
¿Qué te pareció todo el proceso de decorar mi home office? ¿Qué fue lo más que te gustó?
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